Viva como sal y luz

El llamado de Dios a transformar su mundo

Transforme vidas y cambie el curso de la historia
Muchos países se están enfrentando posiblemente a las mayores crisis de toda su historia. ¡Qué tragedia sería si nosotros los cristianos no marcásemos ningún efecto positivo en las necesidades de la nación en la cual vivimos! Sin embargo, la victoria es el destino del pueblo de Dios. Sea parte del plan de Él de transformar su propia vida, las vidas de otras personas y la vida misma de su país.
Jesucristo nunca se encontró con una situación en la que dijo: “Lo siento. No hay nada que se pueda hacer”. En cambio, Él enseñó que los creyentes son la sal de la tierra y la luz del mundo. El mundo necesita desesperadamente un cambio, y nosotros somos las personas que debemos producir ese cambio.
El autor de éxitos de ventas y maestro de la Biblia, Derek Prince, bosqueja nuestra posición estratégica como cristianos en el mundo, incluyendo nuestros privilegios y responsabilidades para impactar vidas individuales, comunidades y naciones enteras. Nos proporciona una oportuna enseñanza sobre cómo…

• Tomar la iniciativa espiritual en su área de influencia
• Identificarse con los propósitos de Dios y extender su reino en el mundo
• Hacer guerra espiritual y derrotar las maquinaciones del diablo
• Utilizar las armas de la oración, el ayuno, la alabanza y el testimonio
• Convertirse en alguien que cambia la Historia para un mundo mejor

Tenemos los medios para alterar el curso de los acontecimientos en nuestras ciudades y naciones conforme a la voluntad de Dios, transformando vidas y cambiando el curso de la historia.

Transform Lives and Change the Course of History

Many countries are facing possibly the greatest crises of their entire history. What a tragedy it would be if we Christians failed to make any positive effect on the needs of the nation in which we live! Yet victory is the destiny of God’s people. Be part of His plan to transform your life, the lives of other people, and the very life of your country.

Jesus Christ never encountered a situation in which He said, “I’m sorry. There is nothing to be done.” Instead, He taught that believers are the salt of the earth and the light of the world. The world is in desperate need of change, and we are the people who must bring about that change.
Best-selling author and Bible teacher Derek Prince outlines our strategic position as Christians in the world—including both our privileges and responsibilities to impact individual lives, communities, and entire nations. He provides timely teaching on how to…

• Take spiritual initiative in your area of influence
• Identify with God’s purposes and extend His kingdom in the world
• Wage spiritual warfare and defeat the schemes of the devil
• Utilize the weapons of prayer, fasting, praise, and testimony
• Become a history changer for a better world

We have the means to alter the course of events in our cities and nations according to God’s will—transforming lives and changing the course of history.