Author: | Ángel de Saavedra Duque de Rivas | ISBN: | 6561000000035 |
Publisher: | eBookClasic | Publication: | October 31, 2017 |
Imprint: | eBookClasic | Language: | Spanish |
Author: | Ángel de Saavedra Duque de Rivas |
ISBN: | 6561000000035 |
Publisher: | eBookClasic |
Publication: | October 31, 2017 |
Imprint: | eBookClasic |
Language: | Spanish |
Ángel de Saavedra, Duque de Rivas (Córdoba 1791-Madrid 1865) tuvo una vida turbulenta, apasionada, romántica y contradictoria como la época en que le tocó vivir. Fue dramaturgo, poeta, historiador, pintor y estadista. Luchó en la guerra de la Independencia contra los franceses en 1808 y tras ésta se exilió por sus ideas liberales en 1823. Vivió en Londres, Francia, Italia y Malta, y en ese momento se apasionó por los autores ingleses de más prestigio entre los románticos (Shakespeare, Byron, Scott). Gracias a una amnistía, regresó a España en 1834 y heredó el título y una gran fortuna, iniciando una evolución hacia posturas más conservadoras. En 1835 estrena Don Álvaro o la fuerza del sino, primer drama español íntegramente romántico y acaso el más representativo del movimiento, pues en ningún otro se acumulan tantos elementos característicos: pasión, misterio, soledad, fuerza ciega de la fatalidad, rebelión, suicidio... Ningún otro consigue fundir tan genialmente estilo culto y llano, verso y prosa, en una acción de desbordada y enloquecida originalidad. Fue embajador en Nápoles y en París, vicepresidente del Senado y del Estamento de Próceres, ministro de la Gobernación y de Marina, presidente del Consejo de Ministros (durante solo dos días de 1854), presidente del Consejo de Estado (1863) y director de las Reales Academias Españolas de la Lengua y de la Historia.
Ángel de Saavedra, Duque de Rivas (Córdoba 1791-Madrid 1865) tuvo una vida turbulenta, apasionada, romántica y contradictoria como la época en que le tocó vivir. Fue dramaturgo, poeta, historiador, pintor y estadista. Luchó en la guerra de la Independencia contra los franceses en 1808 y tras ésta se exilió por sus ideas liberales en 1823. Vivió en Londres, Francia, Italia y Malta, y en ese momento se apasionó por los autores ingleses de más prestigio entre los románticos (Shakespeare, Byron, Scott). Gracias a una amnistía, regresó a España en 1834 y heredó el título y una gran fortuna, iniciando una evolución hacia posturas más conservadoras. En 1835 estrena Don Álvaro o la fuerza del sino, primer drama español íntegramente romántico y acaso el más representativo del movimiento, pues en ningún otro se acumulan tantos elementos característicos: pasión, misterio, soledad, fuerza ciega de la fatalidad, rebelión, suicidio... Ningún otro consigue fundir tan genialmente estilo culto y llano, verso y prosa, en una acción de desbordada y enloquecida originalidad. Fue embajador en Nápoles y en París, vicepresidente del Senado y del Estamento de Próceres, ministro de la Gobernación y de Marina, presidente del Consejo de Ministros (durante solo dos días de 1854), presidente del Consejo de Estado (1863) y director de las Reales Academias Españolas de la Lengua y de la Historia.