Mi Sexo Sin Dolor

Frustrante. Confuso. Devastador. Estas son sólo algunas de las palabras usadas por mujeres para describir el dolor que sienten durante las relaciones sexuales. Una condición que afecta a muchas más personas de lo que incluso muchos médicos se dan cuenta . Si tú, o tu pareja, estáis luchando en este área; por favor, sigue leyendo. Las respuestas que has estado buscando están aquí; y no tendrás que tamizar entre jerga médica, que a menudo confunde más, ni tendrás que escuchar sugerencias humillantes, diciéndote que tus problemas "están en tú cabeza ". Prometo hacer las cosas fáciles y llegar a la base de lo que verdaderamente más te importa: ¡mejorar! Aunque he incluido algunos de los "porqués" de ésta condición que es poco comprendida, éste es principalmente un libro, que explica el "cómo"; y la razón es muy simple. A menudo, el dolor durante las relaciones sexuales es un problema físico que se diagnostica erróneamente como puramente psicológico. Por supuesto, hay consideraciones psicológicas. Si cada vez que tienes relaciones sexuales sientes dolor, ¿cómo no se te va a "meter en la cabeza"? Pero mi experiencia como profesional, me dice que el problema pocas veces comienza allí. El estar "loca" no es lo que está causando tu dolor, pero el dolor puede hacerte sentir que estás loca. La información que encontrarás en este libro ha ayudado a multitud de mujeres a romper este ciclo, y estoy segura de que puede hacer lo mismo por ti. Pero, debido a que la confianza es un factor importantísimo para que una se cure, te contaré uno poco más sobre mi. Llevo más de una década de experiencia profesional como fisioterapeuta especializada en el tratamiento de las mujeres con trastornos musculares en el suelo pélvico. Mis pacientes, e incluso profesionales de la medicina compañeros míos, a menudo me preguntan lo mismo. " ¿Cómo te decidiste a hacer esto? " Cuando empecé mi formación en terapia física en la Universidad de Duke, pensé que quería especializarme en pediatría. A medida que continué con mis estudios, comencé a explorar el mundo de la ortopedia y medicina deportiva general. Durante aquel tiempo en Duke, tuve la suerte de tener una continua exposición al nuevo y creciente campo de la terapia física para la salud de la mujer. Me encantó poder interactuar directamente con los pacientes, así como la oportunidad de trabajar con una población de pacientes muy desatendidos; y por último, la idea de poder ayudar a mujeres con problemas tan personales, me parecía verdaderamente gratificante. Cuando comencé mi práctica, me di cuenta rápidamente de lo poco que la amplia comunidad médica sabía sobre las condiciones del suelo pélvico y como puede llevar a causar dolor durante el coito. De repente, tenía una misión: ¡educar a los médicos, enfermeras, psicólogos y otros especialistas en lo comunes y tratables que son estas situaciones! Voy a ser honesta, he notado algún que otro retroceso por parte de algunos miembros de la comunidad médica. (Tal vez lo hayas notado tú también). Pero me alegra poder informados de que cada día va aumentando el número de médicos, enfermeras y consejeros, que se han abierto a tratar a mujeres con estas condiciones, y además con mucho éxito. Estos pioneros, se han convertido en parte de mi comunidad personal y profesional. Los resultados obtenidos en nuestros pacientes han sido realmente asombrosos. En éstos últimos años, mi práctica ha evolucionado; y ahora tengo el gran privilegio de poder centrarme, en su mayoría, en mujeres con dolores pélvicos. Si sientes dolor durante el coito, creo firmemente que la ayuda de un fisioterapeuta especializado en la salud femenina es la mejor manera de lograr máximos resultados. Y, ¿por qué he escrito un libro de Autotratamiento? Si has estado buscando ayuda durante un largo periodo de tiempo, probablemente ya conocerás la respuesta. Lamentablemente, a pesar de todos los progresos que se han realizado en este campo, profesionales como yo hay muy pocos y nos hallamos...