Muchas veces el correr de los años despedaza las esperanzas mata los sueños y no reconoce la alegría que aunque esporádica solía presentarse algunas veces. Entonces aparece el fantasma de la vida que nos dicta al oído el recuerdo vivo de aquellas ausencias y de ese modo podemos plasmar los RETAZOS que lejanos reaparecen para hacernos llorar para hacernos vibrar y para que volquemos la enseñanza del amor y del dolor y la repartamos entre la gente a modo de enseñanza. En consecuencia podremos comprender que también con el paso de los años aprendemos otra forma de vivir que es la de dar…. dar amor comprensión contención a aquellos seres que lo necesitan y así vivir en paz con nuestro propio silencio.
Muchas veces el correr de los años despedaza las esperanzas mata los sueños y no reconoce la alegría que aunque esporádica solía presentarse algunas veces. Entonces aparece el fantasma de la vida que nos dicta al oído el recuerdo vivo de aquellas ausencias y de ese modo podemos plasmar los RETAZOS que lejanos reaparecen para hacernos llorar para hacernos vibrar y para que volquemos la enseñanza del amor y del dolor y la repartamos entre la gente a modo de enseñanza. En consecuencia podremos comprender que también con el paso de los años aprendemos otra forma de vivir que es la de dar…. dar amor comprensión contención a aquellos seres que lo necesitan y así vivir en paz con nuestro propio silencio.