A los cuatro meses estuvo a punto de morir en un accidente de tráfico. A los dos años le regalaron su primer balón
A los seis, le descubrieron para el fútbol cuando corría por las gradas de una cancha de fútbol playa. A los 11, empezó a estudiar en el mejor colegio de São Paulo para que jugara en un torneo de futsal televisado. A los 12 ya jugaba en el Santos. A los 13 ya hacía entrevistas. A los 14 salió de Brasil por primera vez para probar en el Real Madrid. A los 15 ya tenía un sueldo. A los 16 se atrevió con esa cresta de mohicano que luego le ha hecho de oro. A los 17 ya era una estrella. A los 18 le apodaron el nuevo Pelé. A los 19 ya era objeto de deseo de media Europa. A los 20 ya era el líder de la selección brasileña. A los 21 ya brilla en el Camp Nou…
La Libertadores, la Copa Confederaciones, el premio Puskas 2011, su hijo David Lucca… Neymar. El nuevo O’Rei repasa la trayectoria y las divertidas historias, que hay unas cuantas, de este chico que vuela para convertirse en uno de los jugadores más grandes de todos los tiempos. Desde luego, su meteórica proyección no tiene parangón en el mundo del fútbol, que ya le eleva a la altura de esos dos monstruos que son Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Con ellos convive en una Liga en la que ya ha demostrado que nunca antes una batalla entre Barcelona y Real Madrid por un fichaje estuvo tan justificada.
Una biografía completa de un futbolista ya considerado como uno de los mejores jugadores del mundo
EXTRACTO
3 de junio de 2013. Neymar pisa por primera vez en su vida el césped del Camp Nou. 54.000 personas corean su nombre. “Neyyymaaaaaar, Neyyymaaaaaar.” La camiseta azulgrana le sienta como un guante pese al hueco que queda en su espalda por la ausencia del número. El Barça intentó hasta última hora liberar para la presentación ese dorsal 11 que luce ahora y que estaba en poder de Thiago, ahora en el Bayern, pero no hubo manera. A Neymar, sin embargo, le preocupaba bien poco no tener número. Él solo tenía una obsesión. “Que en la camiseta ponga Neymar JR, que no se olviden del Júnior”, repitió a su agente de comunicación hasta la saciedad, cuando se estaban cerrando los flecos de la presentación.
SOBRE EL AUTOR
Licenciado en Periodismo por la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid, Juan Ignacio García-Ochoa trabaja en el diario de Marca desde el año 2004. Ha cubierto informativamente como enviado especial la Copa Confederaciones de Sudáfrica 2009, el Mundial de Sudáfrica 2010 y la Copa Confederaciones de Brasil 2013. El Real Madrid ocupa su actividad diaria desde hace siete años.
A los cuatro meses estuvo a punto de morir en un accidente de tráfico. A los dos años le regalaron su primer balón
A los seis, le descubrieron para el fútbol cuando corría por las gradas de una cancha de fútbol playa. A los 11, empezó a estudiar en el mejor colegio de São Paulo para que jugara en un torneo de futsal televisado. A los 12 ya jugaba en el Santos. A los 13 ya hacía entrevistas. A los 14 salió de Brasil por primera vez para probar en el Real Madrid. A los 15 ya tenía un sueldo. A los 16 se atrevió con esa cresta de mohicano que luego le ha hecho de oro. A los 17 ya era una estrella. A los 18 le apodaron el nuevo Pelé. A los 19 ya era objeto de deseo de media Europa. A los 20 ya era el líder de la selección brasileña. A los 21 ya brilla en el Camp Nou…
La Libertadores, la Copa Confederaciones, el premio Puskas 2011, su hijo David Lucca… Neymar. El nuevo O’Rei repasa la trayectoria y las divertidas historias, que hay unas cuantas, de este chico que vuela para convertirse en uno de los jugadores más grandes de todos los tiempos. Desde luego, su meteórica proyección no tiene parangón en el mundo del fútbol, que ya le eleva a la altura de esos dos monstruos que son Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Con ellos convive en una Liga en la que ya ha demostrado que nunca antes una batalla entre Barcelona y Real Madrid por un fichaje estuvo tan justificada.
Una biografía completa de un futbolista ya considerado como uno de los mejores jugadores del mundo
EXTRACTO
3 de junio de 2013. Neymar pisa por primera vez en su vida el césped del Camp Nou. 54.000 personas corean su nombre. “Neyyymaaaaaar, Neyyymaaaaaar.” La camiseta azulgrana le sienta como un guante pese al hueco que queda en su espalda por la ausencia del número. El Barça intentó hasta última hora liberar para la presentación ese dorsal 11 que luce ahora y que estaba en poder de Thiago, ahora en el Bayern, pero no hubo manera. A Neymar, sin embargo, le preocupaba bien poco no tener número. Él solo tenía una obsesión. “Que en la camiseta ponga Neymar JR, que no se olviden del Júnior”, repitió a su agente de comunicación hasta la saciedad, cuando se estaban cerrando los flecos de la presentación.
SOBRE EL AUTOR
Licenciado en Periodismo por la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid, Juan Ignacio García-Ochoa trabaja en el diario de Marca desde el año 2004. Ha cubierto informativamente como enviado especial la Copa Confederaciones de Sudáfrica 2009, el Mundial de Sudáfrica 2010 y la Copa Confederaciones de Brasil 2013. El Real Madrid ocupa su actividad diaria desde hace siete años.